El Four Seasons Hotel Chicago goza de una privilegiada ubicación junto al lago Míchigan, lo que le asegura una estupenda estancia en esta metrópolis. En una caminata de pocos minutos llegará a la playa, donde podrá practicar numerosos deportes de agua y acceder a bonitas rutas de senderismo y ciclismo. También puede llegar andando al zoológico del parque Lincoln y a la estación de metro.

Este hotel de lujo lleno de estilo pone a su disposición un estilo excepcional y numerosas prestaciones. Sus elegantes habitaciones cuentan con baño de mármol y todo tipo de comodidades. Además, el personal del exquisito restaurante se encargará de su bienestar culinario y le servirá cocina creativa. También puede relajarse en la inmaculada zona spa, que incluye una piscina interior y un centro fitness.